14 may 2011
Me lastimaron y por no salir lastimada preferí no arriesgar otra vez. Una vez me compré unos patines, me gustaban tanto que solo los usé un par de veces en mi habitación, los guardé y los guardé para que nada les pasase, cuando los quise usar me iban chicos, ya no me quedaban. Si uno no arriesga no gana. Si yo los hubiera usado quizás los hubiera roto, pero usandolos, en cambio así, no los usé pero tampoco arriesgue por no romperlos. Si por no salir lastimados nos vamos a encerrar en nuestro corazón quizás cuando querramos usarlo ya será tarde, aprovechá el momento, es ahora. Arriesga
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